Nos crecen los poblados como hongos en humedal.

No teníamos bastante con La Cañada Real y nos “fabrican” otros asentamientos. Esta vez de gitanos.
Al parecer viene procedentes de Italia, y es que España es el paraíso del inmigrante. Si hasta nos quieren hacer tragar la “pastilla” de la tolerancia mediante anuncios.
En Italia, ser inmigrante ilegal; es delito y lógicamente, ser ilegal, ya lo dice todo por sí mismo: es estar fuera de la ley. Pero bueno aquí parece que debe significar algo distinto a lo que pone el diccionario de la Real Academia, o sea, que la ley y el significado de nuestra lengua usan diferentes idiomas.
Huyendo del supuesto arranque de defensa a lo propio de Berlusconi, que para nada algunos crean que está haciendo como debe, porque tan solo es un Sarkozy a la italiana; una serie de políticas que guiñan el ojo con la ley, a la población severamente descontenta, y que empiezan a ver como opciones reales a ideologías que antaño les pudieran parecer “ultras”. O sea, y a mi entender, no hay peor enemigo que el que se hace pasar por amigo, o el que te da el caramelo y detrás la puñalada. Que algunos sigan felicitando las políticas berlusconistas y saboreen con gusto ese caramelo que yo no me lo trago.
De momento ya tenemos una serie de poblados de esos gitanos que huyen de Italia, en la zona norte de nuestra capital, tres al parecer.
El Árbol del Ahorcado, camino del Juncal en San Sebastián de los Reyes.
Se dedican al robo en el centro comercial de la zona. Son un centenar de gitanos, la policía los tiene catalogados como peligrosos. Los robos en esa zona han crecido alarmantemente.
También está el de las Liebres al otro lado de la M.40, que había sido desmantelado en el 2003 y ha vuelto a “resurgir”.
En el límite entre Alcobendas y el distrito de Fuencarral (junto al polígono industrial Los Calabozos) apareció la pasada primavera otro asentamiento.

Mil gitanos, que se tenga constancia, que se reparten en poblados que a menudo migran cuando se les detectan,
'Estamos hartos de ellos: roban, destrozan los coches, hacen hogueras y dejan basura por la zona'
Declaran vecinos de la zona sufridora, aunque seguirán votando a PSOE y PP, claro está.
Los dueños de un desguace próximo declaran que están "hartos de ellos: roban, destrozan los coches, hacen hogueras y dejan basura por la zona".
Fuentes policiales creen que también se dedican a robar vehículos y una vecina recuerda que "por la noche hay mucho movimiento de coches de lujo".
Desde las asociaciones pro inmigrantes y colectivos muy colegas del de fuera, se dice que la solución es darles estudios y trabajo. La cuestión es quien les hará ir al colegio, y vigilar que sigan yendo, y en cuanto al trabajo, que no hay, que al menos no sea el ser amigo de lo ajeno, o mejor, que se vuelvan de donde vinieron, hace ya siglos.

Carmen Padial.