La elevada tasa de desempleo, está provocando que el número de personas incapaces de pagar las hipotecas que tenían se queden sin su vivienda.
Si el año 2007 las ejecuciones hipotecarias fueron 25.943, en 2008 se registraron hasta 58.686 en los juzgados civiles, los embargos se han convertido en el doble, según datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Si el año 2007 las ejecuciones hipotecarias fueron 25.943, en 2008 se registraron hasta 58.686 en los juzgados civiles, los embargos se han convertido en el doble, según datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
La mayoría son solicitadas por entidades financieras y esto está haciendo que las carteras inmobiliarias de bancos y cajas de ahorros no paren de engordar mes a mes.
Sin ir más lejos, el año pasado se solicitaron tantas ejecuciones hipotecarias como en 2005, 2006, y 2007 juntos, superando ligeramente las previsiones del CGPJ, que preveía 53.272 procedimientos.
Para 2009, el CGPJ espera también subida aunque menor, del 43,5%, equivalente a otras 76.463 actuaciones.
El mayor número de ejecuciones hipotecarias se registró en Andalucía, seguida muy de cerca por Cataluña y, algo más lejos, por Valencia. En cambio, el mayor incremento porcentual tuvo lugar en Murcia, La Rioja y Navarra, en tanto que Asturias fue la región donde menos crecieron estos procedimientos.
Mientras tanto, la banca sigue mirando para sí, concediendo créditos únicamente para la compra de las viviendas que han embargado, o sea, para que se compren sus pisos, los que previamente han embargado.
Las entidades financieras ofrecen unas condiciones más ventajosas si ese piso forma parte de su cartera inmobiliaria que si no lo es. Buena parte de bancos y cajas de ahorros ha comenzado a flexibilizar sus créditos a los clientes para dar salida a su bolsa de viviendas.
Una manera de flexibilizar las condiciones de los préstamos hipotecarios es aplicar rebajas que oscilan de media entre el 20% y el 30% del precio de la vivienda.
Los promotores consideran que esta actuación de bancos y cajas constituye competencia desleal, según distintas fuentes consultadas.
Este trato desigual al cliente se constata en las oficinas de la banca y las cajas, aunque no todas las entidades que lo practican lo admiten de manera oficial.
Banesto, sin ir más lejos ultima el lanzamiento de un portal en internet para vender su cartera de viviendas, el Santander ha creado una web vinculada a su inmobiliaria Altamira y que entrará en funcionamiento en breve.
El Santander negó que concedan un trato favorable a las hipotecas ligadas a pisos de su cartera inmobiliaria. "Se conceden dependiendo del tipo de cliente y de su nivel de riesgo".
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