El martes Santo, 18 de marzo, el Cristo de la Misericordia de la Capilla del Rosario de San Lorenzo de El Escorial (Madrid) fue procesionada como hace todas las Semanas Santas desde el 2001.
Este año estaba el Cristo parado en el Colegio de las Concepcionistas cuando recibió un disparo de escopeta de perdigones de gran calibre, comunica José Luis Herrera, hermano mayor de la cofradía de Nuestra Señora de la Piedad y Cristo Muerto.
El disparo atravesó el farol izquierdo trasero y alcanzó la cruz en su parte baja.
El hecho se denunció a la policía.
La semana anterior a estos hechos también se destrozaron los cristales de la ermita de la Virgen de Gracia.
La policía aun no sabe nada de quien ha podido ser culpable de los hechos.
Esto no es todo, porque el pasado sábado tuvo lugar en Toledo una muestra más de la gran ofensiva a las creencias de millones de españoles cristianos en general y católicos en particular.
El Corpus Christi tiene una tradición especialmente relevante en Toledo, donde el domingo por la mañana se realiza una procesión con el Santísimo Cuerpo de Cristo por las calles engalanadas para la ocasión, que cuenta con cientos de años de antigüedad.
La tarde anterior, cuando miles de familias toledanas y visitantes de muy diversas procedencias recorrían el itinerario procesional, una mascarada organizada por el Ayuntamiento de Toledo asombró a los visitantes al poner en escena una "procesión alternativa" en la que se hacía escarnio de la Virgen María, aparecían obispos y sacerdotes en brazos de mujeres semidesnudas y un sin fin de vejaciones del mismo estilo contra la sensibilidad de los creyentes en la Fe católica.
La responsable de festejos del consistorio toledano, Carmen Jiménez Martín debería de irse a la calle por insultar, humillar y despreciar las creencias de todos esos ciudadanos que acudieron a esa localidad para compartir su Fe y se encontró con ese insulto.
Paséense con el Corán, písenlo o quémenlo, que lo pasee una señora o señor desnudo, o háganlo con la Torá, dejen de meterse siempre con los mismos disfrazándolo de laicismo, si es laicismo que sea laicismo para todos, no vayan abriendo centros musulmanes o exigiendo a empresas sus horas de rezos y se nos llene la boca de laicidad vomitivamente hipócrita.
Dejen a los católicos en paz.
Arawn.
Este año estaba el Cristo parado en el Colegio de las Concepcionistas cuando recibió un disparo de escopeta de perdigones de gran calibre, comunica José Luis Herrera, hermano mayor de la cofradía de Nuestra Señora de la Piedad y Cristo Muerto.
El disparo atravesó el farol izquierdo trasero y alcanzó la cruz en su parte baja.
El hecho se denunció a la policía.
La semana anterior a estos hechos también se destrozaron los cristales de la ermita de la Virgen de Gracia.
La policía aun no sabe nada de quien ha podido ser culpable de los hechos.
Esto no es todo, porque el pasado sábado tuvo lugar en Toledo una muestra más de la gran ofensiva a las creencias de millones de españoles cristianos en general y católicos en particular.
El Corpus Christi tiene una tradición especialmente relevante en Toledo, donde el domingo por la mañana se realiza una procesión con el Santísimo Cuerpo de Cristo por las calles engalanadas para la ocasión, que cuenta con cientos de años de antigüedad.
La tarde anterior, cuando miles de familias toledanas y visitantes de muy diversas procedencias recorrían el itinerario procesional, una mascarada organizada por el Ayuntamiento de Toledo asombró a los visitantes al poner en escena una "procesión alternativa" en la que se hacía escarnio de la Virgen María, aparecían obispos y sacerdotes en brazos de mujeres semidesnudas y un sin fin de vejaciones del mismo estilo contra la sensibilidad de los creyentes en la Fe católica.
La responsable de festejos del consistorio toledano, Carmen Jiménez Martín debería de irse a la calle por insultar, humillar y despreciar las creencias de todos esos ciudadanos que acudieron a esa localidad para compartir su Fe y se encontró con ese insulto.
Paséense con el Corán, písenlo o quémenlo, que lo pasee una señora o señor desnudo, o háganlo con la Torá, dejen de meterse siempre con los mismos disfrazándolo de laicismo, si es laicismo que sea laicismo para todos, no vayan abriendo centros musulmanes o exigiendo a empresas sus horas de rezos y se nos llene la boca de laicidad vomitivamente hipócrita.
Dejen a los católicos en paz.
Arawn.
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