120 trabajadores de Gestamp se enfrentan a un ERE.

La falta de trabajo obliga a Gestamp a presentar un ERE, empresa que también pertenece al sector automovilístico ya que trabaja para casas como Peugeot, Renault o Santana.
El comité de empresa se reunía ayer con la dirección para conocer las características del Expediente.
El expediente aun no se ha presentado a la administración ya que existe un acuerdo de notificación previa a los trabajadores de 15 días.
«El proceso acaba de iniciarse porque en la reunión se han mostrado un poco las características y los motivos que llevan a presentar el expediente de regulación y ahora toca negociar los distintos términos», explica Manuel Montejo, presidente del comité de empresa.
La dirección plantea aplicar la medida a partir del próximo día uno de febrero y hasta final de año, en el que se paralización la actividad durante un máximo de 120 días. Esta paralización afectará a totalidad de la plantilla, excepto los cargos directivos y los mayores de 50 años.
«La dirección dice que se ve obligada a presentar esta medida porque actualmente no hay trabajo para más de 60 personas de los 180 trabajadores directos con los que cuenta Gestamp», explica Montejo.
De los 240 trabajadores que eran hasta el pasado mes de octubre, 200 ya en el mes de diciembre paralizaron su actividad para crear una bolsa de horas, recuperable a lo largo de 2010, con el objetivo de poder evitar medidas más drásticas ante la situación de crisis del sector automovilístico.
Ya durante todo el mes de diciembre se cerró como otra medida más.
«Dependemos de Santana aproximadamente un 10%, pero hay otras empresas del sector importantes con Peugeot e Iveco. Quizás en la que más se ha notado el descenso de pedidos es en esta última, sobre todo porque se trata de transportes de gran carga, que trabajamos menos»
«Es un varapalo porque la situación que se nos ha presentado es peor de la que nosotros habíamos percibido acerca de la viabilidad de la empresa pero habrá que estudiar los datos detenidamente»
La dirección desea el cierre de la fábrica durante un máximo de 120 jornadas laborales que en estos días se instalarán diversas cámaras de seguridad, tres dentro de la misma nave.
«Se ha solicitado un escrito para que expliquen las causas de instalar las cámaras, pese a que se habla de motivos de seguridad durante el cierre, porque a nadie le gusta ser observado».

C.P